domingo, 21 de octubre de 2012

¿Hacia a donde está caminando la UASD?


Por Claudio A. Caamaño Vélez, 22 de octubre 2012
La Universidad Autónoma de Santo Domingo, apropósito de su próximo 474 aniversario, es el fruto de un proceso histórico y social, y no la podemos catalogar como un “resultado” pues su realidad no es estática, esta en constante evolución. El escenario social y político que motivó a convertir a la UASD en lo que es hoy, ha cambiado mucho, sin embargo, esta sigue congelada en el tiempo. No me refiero a su estructura física, ni a su plataforma tecnológica, las cuales han progresado mucho, me refiero a su estructura  orgánica, la cual está entrando en una fase de caducidad. La pregunta no es si habrá cambios profundos, eso es inminente, la pregunta es a que rumbo llevaran esos cambios.
Durante las últimas décadas, las autoridades universitarias han desarrollado un sistemático y efectivo plan de destruir y desacreditar el movimiento estudiantil dominicano. Han estado jugando con una espada de doble filo. Por un lado reduciendo la cuota de poder del estudiantado, por otro destruyendo la verdadera fuerza de la universidad.
En la actualidad los estudiantes no están organizados, ni les preocupa el rumbo  de la universidad, como demuestra el resultado oficial de las pasadas elecciones estudiantiles, donde participó menos de un 16% de la población estudiantil. Se ha creado una clase dirigencial caracterizada por dirigentes mediocres, incapaces de ser verdaderos lideres, y de esta manera desmovilizar a los estudiantes y mantenerlos dispersos. Como menciona Amaury Reyna, en un articulo de fecha 15 de abril de 2009: “Los Dirigentes Estudiantiles carecen de la calidad moral y la ética que caracterizó a los miembros del Movimiento Renovador. Los grupos estudiantiles en la UASD no son más que la representación de los intereses políticos y particulares de algunos”. A ese vergonzoso y peligroso punto hemos llegado.
Por un lado las autoridades cubriendo el déficit con el bolsillo del estudiantado y aplicando expulsiones injustas, rememorando las expulsiones de 1964. Por el otro lado estudiantes acusando a las autoridades de corrupción, malversación de fondos y violación a las leyes. Lo transcendente no es quien tiene la razón, lo importante es el resultado. Le estamos restando a la universidad el imprescindible apoyo social, la sociedad dominicana no se siente cómoda de alimentar con sus impuestos una universidad tan desacreditada. Se le están abriendo las puertas al gobierno para que intervenga la universidad y nos prive de los logros que con tanta sangre se han obtenido. La UASD está perdiendo su fuerza y su reputación, quedando a merced de sus enemigos, los enemigos del pueblo.
Es innegable que la UASD requiere más fondos, como también requiere más eficiencia en el manejo de estos. Es cierto que los estudiantes merecen más calidad en los servicios de la academia, pero también se requieren estudiantes con un mayor compromiso.
No hago este escrito con ánimo de desacreditar, sino imbuido por el amor que siento por mi universidad, con la intención de advertir de esta peligrosa situación. Me aparté de los núcleos de poder de la universidad para poder ver las cosas con mayor imparcialidad.
La familia universitaria tiene que caminar todos de la mano. Respetarnos en la base de nuestras diferencias y apoyarnos en la base de nuestras confluencias. La Ley No.5778 que da autonomía y asigna un presupuesto  a la academia estatal, así como demás logros y reivindicaciones obtenidos, han sido logros de toda la familia universitaria, no de sectores aislados. Es momento que pensemos como institución y pongamos a un lado el individualismo. Como sugiere el editorial de Diario Libre del 6 de julio de 2012: “es necesario otro movimiento renovador en la UASD que consolide los logros y devuelva el orden, la autoridad y la gestión eficiente a la academia”.

jueves, 11 de octubre de 2012

Manfredo Casado Villar, un combatiente revolucionario de leyenda

Combatiente revolucionario de una conducta ejemplar nacido en Hoyo Nuevo, San José de Ocoa, en el seno de una familia de agricultores honrados y laboriosos. Desde joven asumió una actitud de compromiso con la libertad, la justicia y el bienestar del pueblo dominicano, principalmente de los campesinos ocoeños.

Hombre extraordinariam
ente honesto, Manfredo, labró con su ejemplo el liderazgo más sólido del revolucionario comprometido en Los Martínez, Las Caobas, Los Naranjales, Hoyo Nuevo, Parra, El Pinar, Sabana Larga, donde era más conocido, así como entre la juventud de San José de Ocoa y parte de Baní.

Al estallar la guerra el 24 de abril de 1965, su padre, conocido popularmente como Porfirito Casado, ingresó a la ciudad de Santo Domingo y se incorporó a la lucha por la reposición en el gobierno del profesor Juan Bosch y el restablecimiento de la Constitución de 1963 que habían sido destronados por un golpe militar gestado por la oligarquía dominicana dirigida por el imperio de Estados Unidos.

Junto a Porfirito llegaron a las trincheras de los constitucionalistas sus hijos mayores Manfredo y Niño Casado Villar, quienes lucharon durante meses contra las tropas invasoras de Estados Unidos.

Concluida la guerra en septiembre de 1965, esos combatientes ocoeños regresaron a Los Martínez a labrar la tierra y a proseguir su lucha por la justicia social, la libertad y el bienestar de los dominicanos.

Unas veces trabajando en Santo Domingo, otras laborando en el campo, Manfredo no descuidó nunca su labor revolucionaria, lo que le permitió crear una sólida organización con base en Los Martínez, pero apoyada en otros campos de Ocoa, en la ciudad y en Baní.



Fue esa organización esencialmente autónoma, pero sustentada en su liderazgo indiscutido, la que dio refugio y protección a la mayoría de los dirigentes revolucionarios que eran perseguidos a muerte en Santo Domingo.

Aunque Manfredo nunca fue miembro de algún partido de izquierda, en su base político-militar en Los Martínez acogió y protegió a los principales dirigentes del Partido Comunista Dominicano (PCD), los del Movimiento Popular Dominicano (MPD), los del 14 de Junio, entre otros.

En Los Martínez estuvieron durante algún tiempo Plinio Matos Moquete, Henry Segarra, Guillermo Rubirosa Fermín, Rafael –Fafa- Taveras, Pedro Juan Persia, Braulio Torres, entre otros, quienes se internaron en las montañas junto a Manfredo y sus seguidores campesinos.

Toda la juventud de Los Martínez, varones y hembras, dieron un sólido respaldo a la lucha revolucionaria que encabezó Manfredo en los años sesenta hasta mediados de los setenta.

Con su lucha, los campesinos de Los Martínez recuperaron miles de tareas de tierra que detentaba la familia Solano, pese a que tropas de la Policía y del Ejército Nacional se enfrentaban con los agricultores, quienes finalmente permanecieron en la tierra que les pertenecía.

Entre 1967 y 1972, Los Martínez se constituyó en una verdadera base revolucionaria constituida por campesinos de la zona que bajo el liderazgo de Manfredo, sostuvieron su lucha pagando un alto precio en cárcel, torturas, persecución y muerte.

A finales de los años sesenta fue establecido un destacamento, con una dotación de un pelotón del Ejército Nacional en Las Caobas con el propósito expreso de combatir a Manfredo y sus hombres que estaban asentados a unos tres kilómetros loma adentro.

Tan pronto Manfredo muere el 8 de octubre de 1975, ese destacamento fue eliminado, pese a que era la agrupación de tropas más grande en todo San José de Ocoa y que además era reforzado constantemente con soldados que llegaban desde Azua, asiento de la compañía o de San Cristóbal, asiento del batallón del Ejército.

Durante su lucha revolucionaria, Manfredo y sus hombres y mujeres dieron una lección de dignidad y valor al pueblo dominicano y al ocoeños en particular.

Golpeado por el divisionismo de la izquierda, por errores políticos que cometían estas organizaciones y que arrastraban a Manfredo y sus compañeros, pero sobre todo por la confrontación con recursos militares, políticos y de inteligencia del gobierno, su organización fue debilitada. Decenas de hombres purgaron cárcel y otros tuvieron que pasar a la total clandestinidad, tanto en Santo Domingo como en otros lugares, lo que obligó a Manfredo a buscar asilo en la embajada de México en la primavera de 1972.

La llegada de la expedición guerrillera conocida como Playa Caracoles, encabezada por Francisco Alberto Caamaño, que entró por Azua y subió a las montañas de Ocoa, lo sorprendió asilado en la embajada de México.
Liquidada la guerrilla de Caamaño con el asesinato de su líder y otros cuatro guerrilleros, uno de los sobrevivientes, Claudio Caamaño Grullón, logra evadir la persecución militar, entra a la ciudad de Santo Domingo en el mes de abril y al día siguiente se asila en la embajada de México.

Es en esa circunstancia que se conocen dos luchadores revolucionarios ejemplares: Claudio Caamaño, veterano combatiente de la Guerra de 1965 y sobreviviente de la guerrilla de Playa Caracoles, y Manfredo Casado Villar.
De esa feliz coincidencia nació un compromiso revolucionario de continuar la lucha armada en las montañas, para lo cual salieron al extranjero a preparar su retorno.

A Claudio Caamaño le fue permitida la salida, pero se le negaba a Manfredo, pues el gobierno de Joaquín Balaguer quería que se lo entregaran para asesinarlo y con él su ejemplo de que de un humilde campesino puede salir un revolucionario consecuente.

Es mediante una acción audaz de retener a un hijo del embajador de México que Manfredo logra que el gobierno asesino de Balaguer le entregue el salvoconducto para viajar al exterior. Fue sacado del país en 1973 con destino a París, Francia, desde donde de inmediato fue a Cuba para unirse a Claudio Caamaño, quien ya se entrenaba para volver a la lucha armada, junto a Toribio Peña Jáquez y otros compañeros.

En Cuba Manfredo completó su preparación militar y política, retornando al país en junio de 1975 bajo el mando de Claudio Caamaño y acompañado además, por Toribio Peña Jáquez, combatiente de 1965 e integrante de la fuerza guerrillera de Caamaño en 1973, pero que no subió a la montaña por haberse extraviado durante la maniobra de desembarco en la Bahía de Ocoa, el 2 de febrero de 1973.

Provenientes de Cuba, pero llegados desde Puerto Rico en un bote tripulado por revolucionarios de esa isla hermana, Claudio, Manfredo y Toribio, después de vencer una tenaz persecución iniciada desde la costa de Nizao, Baní, pues los tres hombres que los trajeron al país fueron detenidos en La Romana, torturados y de ellos obtuvieron la información del desembarco, el pequeño grupo guerrillero logró internarse en las montañas al norte de Los Martínez.

Su propósito era restablecer la base revolucionaria que había tenido Manfredo en la zona, organizarla, adiestrarla y echarla a la lucha armada para recuperar la iniciativa revolucionaria y provocar la insurrección popular que liquidara el gobierno sanguinario de Balaguer.

A finales de septiembre de 1975, durante un desplazamiento nocturno, Manfredo cayó a un precipicio próximo a Los Martínez, adonde se proponía entrar esa noche, sufrió heridas incluida la rotura de costillas. Los hombres que le daban apoyo logístico lo sacaron hasta Fundación de Sabana Buey, Baní, donde quedó separado de la guerrilla en la montaña, quien tiempo después se enteró de lo sucedido.

Conocida la condición y luego la ubicación de Manfredo, Claudio Caamaño envía personal de su confianza a buscarlo y retornarlo a la montaña para continuar la lucha, pero su mensajero llegó tarde: ya algunos de sus familiares en Santo Domingo habían conocido de su situación e improvisaron un operativo para llevarlo desde Fundación a Santo Domingo, pero delatado por el dirigente del PRD Pablo Rafael Casimiro Castro, quien “cooperó” para su traslado, fue capturado en San Cristóbal por personal dirigido por el general Neit Rafael Nivar Seijas.

Después de someterlo a torturas en la Fortaleza Militar Antonio Duvergé, en San Cristóbal, Manfredo fue asesinado al igual que los otros tres hombres que lo trasladaban en un carro y sus cuerpos acribillados fueron presentados a la prensa con una declaración de que cayeron en un intercambio de disparos.

Aunque los cuerpos de los tres acompañantes de Manfredo, incluido el de su hermano Milcíades, fueron entregados a sus familiares en Santo Domingo, el del luchador revolucionario fue retenido por las tropas de Operaciones Especiales de la Policía y sepultado sin ataúd en una esquina del cementerio de Nizao, San José de Ocoa.

En lugar fue ubicado por otros revolucionarios ocoeños que intentaron sacar sus restos para llevarlos a San José de Ocoa, pero sus familiares pidieron desistir de ese propósito, pues todos ellos eran objeto de amenazas y persecuciones policiales y militares.

Con la crecida del río Nizao con el ciclón David en agosto de 1979, el cementerio de Nizao fue totalmente inundado y la tumba de Manfredo, que estaba localizada en el extremo este, quedó borrada.

Aun es posible que los huesos de Manfredo puedan recuperarse en el lugar, pero habría que hacer excavaciones en un perímetro no menor de 400 metros, porque los referentes de la ubicación exacta, desaparecieron con nuevas crecidas.

Allí se apagó la vida de un campesino ocoeño que saltó a la condición de revolucionario de leyenda, marcado por la combatividad, la honradez y la entrega sincera a la causa del pueblo dominicano. No obstante, de su ejemplo tienen que aprender las actuales y futuras generaciones, para las sucesivas batallas.

Un ‘paquetazo’ peligroso



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Un ‘paquetazo’ pel


Si el Congreso Nacional aprueba las modificaciones tributarias presentadas por el gobierno de Danilo Medina el jueves 4 de octubre de 2012, creo que los dominicanos tienen que prepararse para desde febrero de 2013 registrar cambios importantes en la marcha económico-social del país.
El resultado neto puede ser un deterioro progresivo del nivel de vida de millones de personas por la reducción sustancial de su poder de compra como consecuencia de la ampliación de la base del Itbis y del aumento de los productos que vienen gravados desde hace años.
El cobro escalonado del Itbis a una amplia gama de productos de la dieta básica que estaban exentos (pan, teleras, aceite de todo tipo, sal, café molido, carnes, chocolate, azúcar, mantequilla, pescados, pastelitos, quipes, galletas, arepa, casabe, maicena, harina, trigo, maíz en grano, jamón, longaniza, salchicha, arenque, bacalao, yogur, leche de soya, esquimalitos, hielo, helados, detergentes, fotocopias, entre otros) significará un aumento violento de precios, lo que se traducirá en una rebaja considerable del consumo por empleados con salarios congelados.
Con la reducción del nivel de consumo se puede prever que a su vez las empresas disminuirán la producción por baja de demanda y miles de asalariados perderán sus... http://www.acento.com.do/index.php/blog/6243/78/Un-paquetazo-peligroso.html

DECLARACIÓN DEL MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES DE LA REPÚBLICA DE CUBA, BRUNO RODRIGUEZ PARRILLA, EN EL DEBATE GENERAL DEL 67 PERÍODO DE SESIONES DE LA ASAMBLEA GENERAL DE LA ONU. NUEVA YORK, 1RO. DE OCTUBRE DE 2012.


Felicito al Excelentísimo Señor Vuk Jeremic por su elección como
Presidente de esta Asamblea

 Señor Presidente:

 Nunca antes, América Latina y el Caribe se habían expresado con tanta fuerza y unidad como en la llamada “Cumbre de las Américas”, que excluyó nuevamente a Cuba por imposición del gobierno de los Estados Unidos, celebrada en abril, en Cartagena de Indias.

 La soberanía argentina de las Malvinas, que nuestro país apoya fervientemente, y el cese del bloqueo a Cuba fueron los ejes de un pronunciamiento que demostró que la Patria Americana de Bolívar,
“Nuestra América” de Martí, ha entrado en una nueva época, en el siglo de su definitiva independencia.

 Meses antes, precisamente en Caracas, había ocurrido la constitución de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). “Ningún otro hecho institucional de nuestro hemisferio durante el
último siglo refleja similar trascendencia”, escribió al respecto el líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz.

 Sabemos que la CELAC aún deberá ser construida en los hechos para que nuestros pueblos puedan “andar en cuadro apretado como la plata en las raíces de los Andes”, pero definitivamente, América Latina y el Caribe
han cambiado y se propone hacer una contribución mayor al “equilibrio del mundo”.

  Sin embargo, no podrían subestimarse las amenazas, los peligros ni los obstáculos.

 La política de Estados Unidos hacia nuestra región, con gobiernos demócratas o republicanos  es, en esencia, la misma. Las promesas del 2009 que hizo el actual Presidente no se cumplieron. La voracidad por nuestras riquezas, la imposición de modelos, cultura, pensamiento y la injerencia en nuestros asuntos no cesan.

 Aunque se hable del “poder inteligente” y se utilicen nuevas y fabulosas tecnologías, prevalecen el enfoque de seguridad y el despliegue militar, en vez de una relación democrática y de beneficio mutuo entre Estados soberanos e iguales.

 En circunstancias de crisis económica global, agotamiento de recursos y nuevo reparto del mundo, la OTAN continúa percibiendo a nuestra región como periferia euro-atlántica, donde se puede intervenir para asegurar  intereses, incluso ilegítimos.

 Las inminentes elecciones en la hermana República Bolivariana de Venezuela serán decisivas para el destino común de la región. Al pueblo venezolano y a su líder, el Presidente Chávez, expresamos toda nuestra solidaridad ante los intentos de desestabilización que se avizoran.

 Los poderes que gobiernan en los Estados Unidos cometerían un gravísimo error, de consecuencias impredecibles, si alentaran revertir por la fuerza las conquistas sociales de nuestros pueblos.

 Con discreción y modestia, Cuba siempre ha contribuido a la paz en Colombia, dio todo su apoyo a las conversaciones exploratorias confidenciales realizadas a lo largo del año en La Habana y así lo hará como Garante y Sede del proceso de diálogo entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia que se avecina.

“Nuestra América” permanecerá mutilada mientras Puerto Rico, nación latinoamericana y caribeña, no sea independiente, causa que tiene nuestro mayor apoyo.

Señor Presidente:

 No se parece el mundo de hoy a aquel que auguraban los redactores de la Carta de las Naciones Unidas, sobre las cenizas de la Segunda Guerra Mundial, cuando resolvían preservar a nuestras generaciones del flagelo de la guerra, proteger los derechos fundamentales del ser humano y la igualdad entre naciones grandes y pequeñas; fomentar la justicia, la dignidad y el progreso social.

Ahora se promueve, sin disimulo, el derrocamiento de gobiernos mediante el uso de la fuerza y la violencia, se impone el “cambio de régimen” desde Washington y otras capitales de la OTAN, y se libran guerras de conquista por el control de recursos naturales y zonas de importancia estratégica.

 El gobierno de los Estados Unidos y algunos de Europa han decidido el derrocamiento del gobierno sirio, para lo cual han armado, financiado y entrenado a los grupos opositores, incluido el uso de mercenarios.

 Gracias, fundamentalmente, a la firme oposición de Rusia y China, no ha sido posible manipular al Consejo de Seguridad, para imponer la fórmula intervencionista aplicada en aventuras bélicas recientes.

Cuba reafirma el derecho del pueblo sirio al pleno ejercicio de la autodeterminación y la soberanía, sin injerencia ni intervención extranjera de ningún tipo. Para ello, han de cesar la violencia, las masacres y los actos terroristas que han ocasionado un alto número de pérdidas de vidas inocentes. Tiene que terminar también el trasiego de armas y dinero a los grupos insurgentes y la vergonzosa manipulación mediática de la realidad.

 Corresponde a la Asamblea General usar todas sus facultades para promover una solución pacífica a la situación que desgarra a la nación árabe e impedir que se desate una agresión militar extranjera con graves consecuencias para todo el Medio Oriente.

 La Asamblea General debe actuar resueltamente en el reconocimiento del Estado palestino, como miembro pleno de la Organización de las Naciones Unidas, con sus fronteras anteriores a 1967 y su capital en Jerusalén Oriental; y ha de hacerlo ya, con o sin el Consejo de Seguridad, con veto estadounidense o sin él, con o sin nuevas negociaciones de paz.

 Señor Presidente:

 La crisis económica global, que hoy se manifiesta con particular crudeza en Europa, refleja la incapacidad de los gobiernos y las instituciones para resolver un problema que requiere replantearnos los fundamentos del actual sistema de relaciones económicas internacionales que solo sirve para expoliar a los países subdesarrollados.

 Las duras consecuencias de la crisis en el mundo desarrollado y de las fallidas políticas hasta ahora adoptadas para intentar detenerla, siguen descargándose sobre los trabajadores, la creciente masa de desempleados, los inmigrantes y los pobres, cuyos movimientos de protesta son brutalmente reprimidos.

 Los augurios de una nueva espiral en los precios de los alimentos, como resultado de la sequía que afecta a gran parte de América del Norte, amenaza con hacer todavía más crítica la situación de inseguridad alimentaria mundial.

Avanza también la destrucción del medio ambiente, se acelera la pérdida de la biodiversidad y el equilibrio natural de los ecosistemas, mientras que la agudización de los patrones de producción y consumo irracionales, la marginación de más de la mitad de la población mundial y la ausencia de medidas globales para detener el avance del cambio climático, suponen un riesgo cada vez mayor para la integridad física de naciones enteras, particularmente los pequeños Estados insulares.

 Frente a estos colosales retos, cabría preguntarse qué puede justificar que, veinte años después de concluida la llamada “Guerra Fría”, el gasto militar se haya casi duplicado para alcanzar la astronómica cifra de 1.74 millones de millones de dólares. Como ha advertido el Presidente Raúl Castro Ruz, ¿contra qué enemigo se usarán esas armas? ¿Servirán para eliminar a las masas de pobres que no soporten más su pobreza o para enfrentar incontenibles migraciones de sobrevivientes?

 En estas circunstancias, urge salvar la Organización de las Naciones Unidas y, al mismo tiempo, someterla a profunda reforma para ponerla al servicio de todos los Estados igualmente soberanos y sustraerla de las arbitrariedades y doble rasero de unos pocos países industrializados y poderosos.

 Deben hacerse prevalecer con determinación el Derecho Internacional y los Propósitos y Principios de la Carta, restablecer el papel central de la Asamblea General y refundar un Consejo de Seguridad democrático, transparente y verdaderamente representativo.

 La Cumbre del Movimiento de Países No Alineados se celebró exitosamente en Teherán y reafirmó sus posiciones en la defensa de la paz, la independencia y la igualdad soberana de los Estados, la justicia, el derecho al desarrollo, la soberanía sobre los recursos naturales, el desarme general y completo, en particular el desarme nuclear; y reafirmó el derecho al uso de la energía nuclear con fines pacíficos. A la Presidencia del Movimiento daremos todo nuestro concurso.

 Señor Presidente:

 El 31 de julio pasado, el Departamento de Estado de los Estados Unidos incluyó nuevamente a Cuba en su lista unilateral y arbitraria de Estados patrocinadores del terrorismo internacional.

 El verdadero propósito de mantener a Cuba en ese listado espurio es fabricar pretextos para endurecer la persecución de nuestras transacciones financieras y justificar la política de bloqueo, que ha provocado invaluables daños humanos y económicos por un millón de millones de dólares, al valor actual del oro.

 Los Estados Unidos no tienen la más mínima autoridad moral ni política para enjuiciar a Cuba.

 Es conocido que el gobierno norteamericano ha utilizado el terrorismo de Estado como un arma de su política contra Cuba, que ha provocado 3 478 muertes y 2 099 discapacitados entre nuestros compatriotas, al tiempo que ha cobijado a decenas de terroristas, algunos de los cuales aún hoy viven libremente en ese país, mientras mantiene en prolongado e inhumano encarcelamiento o retiene cruel y arbitrariamente en su territorio a los cinco luchadores antiterroristas cubanos.

 Cuba rechaza enérgicamente la utilización de un tema tan sensible como el terrorismo con fines políticos y demanda que el gobierno de los Estados Unidos deje de mentir y ponga fin a este vergonzoso ejercicio, que ofende al pueblo cubano, a la comunidad internacional y desacredita la causa de la lucha contra el terrorismo.

 Reiteramos a los Estados Unidos, en vísperas de sus elecciones, nuestra indeclinable vocación de paz y el interés de avanzar hacia la normalización de las relaciones mediante el diálogo, en pie de igualdad y con pleno respeto a nuestra independencia.

 Con toda certeza, ocurra lo que ocurra, nuestro pueblo, “con todos y por el bien de todos”, persistirá en el camino escogido hasta “conquistar toda la justicia”.

 Muchas gracias.



martes, 2 de octubre de 2012

Tribunal ordena paralizar la exploración en Loma Miranda


Fallo, además, dispone permitir el paso de la población a ese recurso natural

LA VEGA. La Tercera Cámara Penal del Distrito Judicial de La Vega acogió ayer un recurso de amparo incoado por la fundación Padre Rogelio en contra de la exploración de Loma Miranda por parte de la empresa Xstrata Nickel Falcondo.
Con el fallo del tribunal, presidido por la magistrada Argelia García, se ordena a la empresa minera paralizar los trabajos de exploración en Loma Miranda, así como permitir el libre paso a la población hacia este recurso natural.
El recurso incoado por la fundación Padre Rogelio en contra de Falcondo establece que la empresa no dispone de los permisos ambientales de explotación en la referida zona.
La jueza además impuso el pago de RD$300 mil al día, si la empresa no cumple lo dispuesto por el tribunal, como una medida precautoria. Resalta que si se materializa la explotación de Loma Miranda, se provocarían graves daños ambientales al medio ambiente y la producción agrícola y ganadera de la zona.
La Fundación Padre Rogelio estuvo representada por los abogados Juan Manuel Morel y Domingo Reinaldo.
Entretanto que el vocero de la empresa Xstrata Nickel Falcondo, Luis Rosado, adelantó que en las próximas horas se apelará el fallo emitido por el citado tribunal. "El tribunal, además, no puede pedir a Falcondo que abra la puerta al público de una propiedad que es privada", manifestó Rosado.
También dijo que ese fallo judicial está divorciado de los reales derechos de "la libre empresa" y de la seguridad jurídica del país.